El Presidente Evo Morales promulgó la nueva Ley Educativa «Avelino Siñani-Elizardo Pérez» en la sede de la Confederación Sindical de Maestros Rurales de Bolivia. Morales manifestó su convencimiento de que con este instrumento legal se logrará la liberación y descolonización de Bolivia.
Morales destacó la importancia de los maestros en la aplicación de esta norma, que fue elaborada por los educadores, padres de familia, sectores sociales, expertos y autoridades para lograr el consenso antes de ser enviada a la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) para su aprobación.
«Los maestros son los soldados e instrumentos de la liberación y la descolonización de Bolivia», indicó al puntualizar la importancia de la labor que debe cumplir este sector.
Igualmente señaló que los maestros tendrán en sus manos una Ley que fue construida por bolivianos y no por consultores del Banco Mundial (BM) o del Fondo Monetario Internacional (FMI), como sucedía en el pasado.
Dijo que se debe fomentar el patriotismo en las aulas para que los estudiantes defiendan los intereses nacionales, lejos de imposiciones que estaban al servicio de intereses extranjeros.
El Jefe de Estado agregó que igualmente la educación debe incentivar la solidaridad, una vez que «es más importante compartir antes que competir».
Reiteró que la nueva Ley Educativa busca «la liberación nacional a fin de superar lo sucedido en el pasado con la vigencia de una educación alienada y condicionada».
La educación en Bolivia será intracultural, intercultural y plurilingüe. Uno de los objetivos de esta norma es que se promoverá la educación secundaria Comunitaria Productiva para la obtención del diploma de Bachiller Técnico Humanístico.
El ministro de Educación Roberto Aguilar enfatizó que la educación «será un espacio de la liberación y la construcción de un modelo social». Indicó que, a partir de hoy, la educación ya no será solamente formativa e ilustrativa, sino que estará orientada para la vida.
La Ley Educativa tiene 92 artículos y 12 disposiciones transitorias. Destaca entre sus ejes estratégicos la educación productiva, equidad de género, fortalecimiento de la calidad educativa y calidad de la enseñanza.
Las Normales serán sustituidas por las Escuelas Superiores de Formación de Maestros y Maestras, como instancias reconocidas por el Estado para formar docentes y será creada una Universidad Pedagógica para los cursos de post grado destinados a cualificar a los educadores.
Aguilar destacó la propuesta que, a su juicio, contempla un modelo educativo «social, comunitario y productivo», respaldado por la nueva Constitución, y garantiza la inamovilidad y especialización de los maestros.
«Refleja el sentido de abrir las puertas de la educación y de crear las condiciones de igualdad y oportunidad para todas y todos los bolivianos. Es un modelo social, porque lo que busca es que ningún boliviano quede al margen del derecho a la educación» manifestó Aguilar.
Entre las principales características de ese documento trabajado desde el 2006, Aguilar destacó el fortalecimiento de las «escuelas de frontera», como núcleos de educación integral comunitaria y de apoyo a los programas de alfabetización y post-alfabetización.
Subrayó que el derecho a la educación significa que «sea de acceso a todos los bolivianos, en cualquier momento de su vida y en cualquier condición que se encuentre». Dijo que la educación es obligatoria en todo el país desde el nivel primario hasta la finalización del nivel secundario.
Añadió que el Ministerio de Educación y las autoridades jurisdiccionales competentes asegurarán el cumplimiento de la obligatoriedad escolar a través de alternativas institucionales, pedagógicas y de promoción de derechos, que se ajusten a los requerimientos locales y comunitarios, urbanos y rurales, mediante acciones que permitan alcanzar ese resultado.
En esa dirección, Aguilar indicó que la nueva ley educativa prevé que el sistema educativo nacional tendrá una estructura unificada en todo el país, para asegurar su ordenamiento y cohesión, la organización y articulación de los niveles y modalidades de la educación y la validez nacional de los títulos y certificados que se expidan.
Explicó que los Servicios Departamentales de Educación se regirán en base a un parámetro curricular básico que será igual para todos los bolivianos, aunque existirá un currículo regionalizado que se adapte a las condiciones geográficas, culturales y lingüísticas.
Agregó que las autoridades jurisdiccionales propiciarán, además, un currículo diversificado referido a aquellos aspectos que consideren pertinentes, para mejorar la vinculación de los estudiantes con el mundo de la producción y el trabajo.
El reglamento del escalafón nacional del servicio de educación será el instrumento normativo de vigencia plena que dará respaldo a la carrera docente, administrativa y de servicio del sistema educativo. También se reconocerá al Magisterio el derecho a la sindicalización, como medio de defensa profesional, respetando su participación activa en el mejoramiento de la educación.
Hecho histórico
La promulgación de la Ley de Educación fue considerada por la Central Obrera Boliviana (COB) como un hecho histórico por el lugar donde se publicó, así como por su elaboración y contenido.
«La promulgación de la Ley de Educación tiene un significación histórica, no sólo porque se la haya promulgado en una casa sencilla como la de los maestros rurales de Bolivia, sino porque es la primera vez que se construye en forma participativa, no sólo con los maestros sino con el conjunto de sectores sociales, económicos y políticos que tienen que ver con la educación», declaró a al ABI el sindicalista Bruno Apaza.
Puntualizó que «la responsabilidad de la educación ya no será sólo de los maestros y del Estado, sino de toda la sociedad boliviana».
«Esta Ley rescata y revaloriza los principios y fundamentos de lo que fue la escuela ayllu y la proyección historia que tenemos hoy como bolivianos, de contribuir a una visión de la sociedad y de la economía, no sólo en Bolivia, sino en el mundo», remarcó.
Apaza enfatizó que «el principio de la identidad cultural es uno de los factores relevantes de esta Ley».